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Verano en movimiento: por qué es clave que los niños sigan activos en vacaciones

Foto del escritor: ACJACJ

El verano es sinónimo de descanso y diversión, pero también puede convertirse en una etapa de sedentarismo para muchos niños. Con la ausencia de la rutina escolar, el tiempo frente a las pantallas suele aumentar y la actividad física puede quedar en segundo plano. Sin embargo, mantenerse en movimiento es clave para el bienestar infantil, ya que el juego y la exploración no solo fortalecen el cuerpo, sino que también estimulan la creatividad, la socialización y el desarrollo emocional. Fomentar un verano activo es una oportunidad para que los niños descubran nuevas formas de moverse, se conecten con su entorno y disfruten de unas vacaciones llenas de energía y salud.



Beneficios del movimiento en la infancia

La actividad física es esencial para el desarrollo integral de los niños, impacta tanto en su bienestar físico como emocional. Mantenerse en movimiento durante el verano ayuda a fortalecer músculos y huesos, mejora la coordinación y previene problemas de salud. Además, el ejercicio favorece el descanso, dado que los niños que se mantienen activos duermen mejor y tienen más energía durante el día. Pero los beneficios van más allá del cuerpo: el movimiento también estimula la producción de endorfinas, reduciendo el estrés y mejorando el estado de ánimo. Ya sea a través del juego libre, el deporte o la exploración al aire libre, moverse es una necesidad para el crecimiento saludable y feliz de los niños.


La OMS recomienda que todos los niños y adolescentes realicen una media de 60 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada al día, incluyendo actividades que fortalezcan los músculos y los huesos, al menos tres veces por semana.

El verano cambia las rutinas

Las vacaciones de verano representan un cambio radical en la rutina de los niños. Sin la estructura del horario escolar, los días se vuelven más flexibles, lo que puede ser una gran oportunidad para el descanso y el juego, pero también un riesgo si el tiempo libre se llena de actividades sedentarias. Muchos niños pasan más horas frente a pantallas, ya sea viendo televisión, jugando videojuegos o usando dispositivos móviles. Esta falta de movimiento no solo afecta su salud física, sino que también puede influir en su estado de ánimo y su capacidad de concentración. Sin embargo, el verano es también el momento perfecto para aprovechar el buen clima, salir al aire libre y descubrir nuevas formas de moverse, promoviendo hábitos saludables que pueden mantenerse a lo largo del año.


Actividades para fomentar el movimiento

El verano ofrece una infinidad de posibilidades para que los niños se mantengan activos mientras se divierten. Los deportes al aire libre, como la natación, el ciclismo o el fútbol, son opciones excelentes para ejercitarse sin que lo sientan como una obligación. También los juegos tradicionales, como la rayuela, la cuerda o la escondida, permiten moverse mientras socializan con otros niños. Otra gran alternativa es la exploración de la naturaleza: caminatas, paseos por parques o incluso una búsqueda del tesoro pueden convertir el ejercicio en una aventura. Además, el movimiento no solo se relaciona con el deporte; actividades como el baile, el teatro o incluso el arte en espacios abiertos pueden estimular tanto el cuerpo como la creatividad. Lo importante es que cada niño encuentre una actividad que disfrute, para que moverse sea un placer y no una tarea.





Un verano activo en ACJ

En la Asociación Cristiana de Jóvenes, creemos que el verano es una gran oportunidad para que los niños se mantengan activos, aprendan nuevas habilidades y fortalezcan lazos con su comunidad. Por eso, ofrecemos programas de recreación y deportes diseñados para todas las edades, con actividades que combinan diversión y movimiento. En nuestra Colonia de Verano, los niños de 2 a 11 años pueden disfrutar de los amigos de siempre, diversión saludable y una propuesta integral renovada que incluye actividades deportivas, creativas y recreativas para estimular tanto su cuerpo como su mente. Además, para los niños y adolescentes de 2 a 17 años, ofrecemos el programa Verano Activo, donde la diversión está asegurada con deportes y momentos para compartir con amigos, promoviendo una vida activa y saludable. Nuestras sedes cuentan con espacios ideales para el juego libre, donde los niños pueden explorar, correr y socializar en un ambiente seguro.



¡En ACJ, trabajamos para que cada niño pueda disfrutar de unas vacaciones en movimiento, con experiencias enriquecedoras que contribuyan a su desarrollo físico, emocional y social!


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